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24/12/09

De Julian para Jesús

¡Muchas gracias por tomarte la molestia de contestarme, y por la foto !

Yo por mi parte creo que tengo una o dos fotos en la que estoy yo sólo (que estoy buscando como loco), pero nunca una colectiva como tienes tú. Después de 50 años tenía una imagen muy difuminada de las enfermeras que estuvieron con nosotros, y sólo recordaba el nombre: Domi.
y efectivamente al ver la foto, la he recordado también físicamente, muchas gracias por el detalle. Me imagino que si vive, habrá pasado de los 80 años, y creo que entonces era una de las jefas de otras enfermeras. Lamentablemente, después de regresar de la Sabinosa, perdí contacto con mis compañeros de entonces y no me acuerdo de ninguno.Nosotros también andamos un poco metiditos en años, yo tengo 57.

Saludos a todos y Feliz Navidad y Año Nuevo.

Miguel P. nos felicita por Navidad

Hola Sabinosos, os deseo una Navidad plena de Amor y Risas. Animaos a escribir.
Un saludos para todos.

Miguel P.

De Jesús para Julián

Con mucho gusto te respondo, compañero Julián.

La señorita que aparece en la foto, efectivamente, es la Srta. Domi.

Y sí, tengo otra foto que se la envié a Scila. Imagino que por problemas de espacio no la habrá podido colgar aquí. Se la vuelvo a reenviar por si la puede poner. Sino pudiera ser, si me dejas una dirección de correo te la envío sin ningun problema.

Yo estuve, sino recuerdo mal, en el año 1959 y en 1963. Las dos veces coincidí con la Srta Domi, y como ya comenté, conmigo se portó muy bien. Yo tengo muy buenos recuerdos de aquella época, pero parece que soy el único, pues por todos los comentarios que leo veo que todos tenéis muy malos recuerdos del paso por la Sabinosa. Puede que sea porque yo iba con varios niños de mi barrio y no me sentia sólo, o quizá me pase como en la mili, que borramos de la mente los momentos malos y nos queremos acordar sólo de los buenos, no sé, pero ya veo que todos lo véis desde otro punto de vista, muy diferente al mío.

 

Un cordial saludo a todos los Sabinosos.

 
Jesús, de Tetuán. Madrid.

22/12/09

Las fotos perdidas



Como habréis comprobado, Flickers- el sitio donde tenía alojadas las fotos de los sabinosos- está fallando, no sólo en esta página, de modo que de momento no hay fotos, he colocado en su lugar el vídeo-montaje del NoDo con la Sabinosa. Felices fiestas a todos!!

Ana, el correo perdido

Ana dejó un correo hoy, y lo abrí, y le contesté pero, en ese momento, mi ordenador tuvo un fallo y supongo que se perdió mi respuesta y, lo que es peor..., se perdió el correo de Ana y por tanto su dirección. De modo que si vuelves por aquí, espero que sí, te ruego que vuelvas a dejar tu dirección de correo y me pondré en contacto contigo.
Hasta pronto.

20/12/09

Seguimos creciendo

Un nuevo sabinoso se incorpora al Club: Marcos desde la Rioja, a quien damos la bienvenida más calurosa (pese a las temperaturas siberianas que disfrutamos en esta fechas). Eso sí, nos gustaría pedirte alguna foto si la conservas, es una forma de intentar reconocernos unos en los grupos de otros. También necesitamos un correo (e-mail) en el que contactar contigo. Lo dicho, bienvenido a este lugar y confío en leerte de vez en cuando.
Un abrazo /Scila

Marcos R.

Foto: Juan A.

Hola!
Yo también estuve en La Sabinosa, cuando tenia 8 años. Los 3 meses que estuve no se me olvidan. En los años 50, los años del hambre, nuestros padres nos apuntaban donde podían. Salimos de Logroño 8 chavales en una furgoneta chata, de chapa Pegaso, francesa que tenia una cruz sanitaria pero con un palo más, dirección Zaragoza donde pernoctamos en la plaza el Pilar, al lado de la cruz de los caídos (ahora hay una cascada de agua.
Salimos para Tarragona y, en Lérida, en medio de la nada y con un calor de justicia, nos dieron un bocadillo y, hasta La Sabinosa.
Todo lo que cuentan en los correos es verdad, y más. Nos engordaban como a cochinos, y nos pesaban todas las semanas, el que no llegaba al peso... doble plato y hondo, hasta el borde (plato catalán), yo devolví una vez al suelo, y rellenaron otra vez el plato, y la sargento detrás, pero el que devolvía dentro del plato le hacían comer todo lo que había devuelto, (yo le cuento al hijo estas historias y se queda con la boca abierta).
Las señoritas enfermeras con la cruz doble en la bata, te pegaban unos tortazos que te tiraban de espaldas al suelo y, en las palmas de las manos, nos golpeaban con una pala de jugar a pala, pero con el CANTO, y con las llaves en la cabeza por que se hacian daño si lo hacían con los nudillos de las manos.
Un servidor tuvo suerte, procuré pasar lo más desapercibido y, aún así, tuve algún problema.
Me acuerdo del dia San Joan en la explanada, una hoguera enorme, el rosario todos los días, las excursiones a Roda de Bará, Torre de Escipión, el acueducto, las cestas que hacíamos con las hojas de las palmeras, aquello creo que era lo más parecido a una cárcel.
La vuelta para casa, en tren, en 3ª clase, vagones de madera y los asientos también, el calor del verano los túneles y la máquina de vapor, (sólo imagínatelo) así que todo lo que cuentan es verdad, era los años de hambre y no se podía hacer otra cosa.
Bueno Scila, no te aburro mas, porque parecen historias para no dormir, y ahora la juventud lo tiene todo y se quejan, pero que no vuelva lo de antes.

Saludos/ Maquis.

18/12/09

Un nuevo sabinoso

Hola Julián, bienvenido a este rincón donde se lamen las heridas de los recuerdos los que pasaron por aquel Preventorio que tan profunda huella nos dejó a la mayoría. Se ha publicado tu artículo a pesar de incumplir el único condicionante: darnos tu correo y, si es posible, aportar alguna fotografía tuya o de tus compañeros de aquella época. De todas formas te agradecería que nos proporcionaeses ese dato- el correo-, y busques en el baúl de los recuerdos antiguos esa foto en blanco y negro, quizás un poco sepia ya por los años. De esta forma esperamos reencontrar amigos al identificarse en esas fotos colectivas que nos hacían las cuidadoras por un durazo de la época (veinte reales).


Espero verte por aquí con frecuencia. Un abrazo/

Julián O.



¡Hola!.En el año 1.959 estuve en el Preventorio de la Sabinosa, y desde luego para mí fue un poco desagradable. Al salir de la estación ya ví algo que no iba bien, desde el punto de vista del trato a los niños, nos tumbaron en el suelo como sardinas en lata y una manta como colchón hasta... Tarragona, eso sí, las monjas y las "seño" iban cómodamente tumbadas en los asientos. Cuando llegamos a los pabellones (medio zombies por las condiciones del viaje), nos quitaron los bocadillos, bollos o caramelos que nos dieron nuestras madres en Madrid, y nos obligaron a echarlos al suelo, encima de una especie de capote que nos dieron. Después nos dejaron en pelotas y a la ducha de cabeza, y en esa bienvenida pude presenciar los resbalones que se producían, ya que a algunos los empujaban a la fuerza y si alguno seguía negándose les agarraban por el cuello y le metían la cabeza debajo de los grifos con lo cual tambinén pude observar que en los forcejeos, se golpeaban la cabeza con los mismos, por lo que ya ví la sangre el primer día, (los niños lloraban y llamaban a sus madres). 
Las comidas tenían un olor nauseabundo, una mezcla de lentejas con fideos y judías pintas, que muchas veces incluían "piedrecitas" y algún gusanillo. SÓLO NOS DABAN UN VASO DE AGUA con la comida y estaba prohibido beber más, lo cuál provocaba que entre nosotros mismos nos quitásemos el agua de la mesa (al compañero que le quedaba un poco de agua en al vaso le decíamos: mira una gaviota verde, y cuando miraba, nos bebíamos de un trago la que tenía). Los que se negaban a comer o vomitaban, las monjas cogían una cuchara y le metían la comida a la fuerza, y esto provocaba a su vez diarreas, eso sí, a los que les pasaba esto les pasaban a una mesa aparte y les daban arroz blanco con pescado cocido, que era un manjar comparado con los guisotes que nos endiñaban. Después de comer, siesta obligatoria de 3 horas que más que siesta era una tortura, nos obligaban a estar acostados de lado mirando a los servicios. NO NOS PODÍAMOS MOVER, NI CAMBIAR DE POSTURA, NI LEVANTARSE PARA HACER TUS NECESIDADES, y era normal escuchar los gemidos de tus compañeros haciendo esfuerzos para contener la evacuación de las aguas mayores y menores. 
Cuando nos levantábamos de la siesta, las "seño" iban de "caza" para separar a los que se habían cagado en la cama y los "inflaban a hostias" y después a empujones los mandaban a la ducha, repitiéndose los resbalones y descalabros en algunos casos. Lo que sí puedo constatar es que se producían frecuentes fugas de niños desesperados, por no poder aguantar más las humillaciones. 
En teoría este centro lo "vendían" a los padres como un Preventorio para prevenir la tuberculosis en los niños, o que éstos fueran propensos, y que con buena comida, playa y aire libre, sería lo ideal para ellos. Pero según fuí creciendo, comprendí que aquello fué una herramienta para que los niños de los "rojos republicanos" no se les ocurriera de mayores volver a rebelarse contra la dictadura de Franco, y eso era lo que querían PREVENIR y no la tuberculosis, además ningunos de nosotros estaba tuberculoso, ni éramos huérfanos, ni estábamos mal alimentados en nuestras casas, y ni estábamos famélicos, es más, cuando terminó nuestra estancia, regresamos la mayoría MAS DELGADOS que cuando ingresamos. Los niños procedían sobre todo de Madrid, Valencia, y Cataluña, curiosamente las provincias que más se opusieron y aguantaron en la Guerra Civil.
Por último quisiera preguntarle a Jesús de Tetuán, si la señorita enfermera que aparece en la foto, es la famosa Domi, y si tiene alguna más de ella. Me alegro que te tratara bien, conmigo personalmente no se metió mucho, porque lo mejor que hice fué pasar lo mas inadvertido posible, ahora bién, también "repartía" lo suyo, y por supuesto había enfermeras más agresivas que ella.
Saludos a todos, y en especial a Jesús de Tetuán


Publicado por Julián para Scila - La Sabinosa a las 18/12/09 00:00

16/11/09

José Fco., también de Logroño

Foto de: EL KISKI

Buenos días amigos sabinosos.
Soy José F., de Logroño. Vuelvo a ponerme en contacto con vosotros, para facilitaros más fotografías. En esta ocasión me he puesto en contacto con un amigo que también estuvo en esa cárcel y me ha dado esta fotografía que os adjunto. Comentaros que en mi barrio, hay un grupo enorme de gente que estuvo allí, el barrio en cuestión se llama “Barrio de Yagüe”, en honor al General Juan Yagüe, (así hemos salido, todos rojos), lógicamente conozco a todos, y, a medida que los veo les comento esta página, intentaré conseguir más fotos para poderlas mostrar. Esta foto, no lo sabemos con seguridad, pero parece ser que es de 1965, mi amigo no recuerda que trimestre fue. Los que están en la foto son todos del barrio de Yagüe en Logroño.

1-Agachado a la izquierda: Antonio I (el Kiski).
2-Agachado del centro: José A. o (el Vitaminas).
3-Agachado derecha: Ubaldo T. (el Ubaldo).
4-Arriba izquierda: Aurelio S. (el Pata).
5-Arriba centro: Víctor J. (el Cotorra).
6-Arriba derecha: José A. (el Peñita).

11/10/09

De Miguel P.

Gracias Scila por publicar mi mensaje. Y a Juan por su respuesta, ya suponía que era María Tutor, hay caras que no puedes olvidar. La primera vez que estuve fue de Diciembre del 59 a Marzo del 60, tenia 7 años y estaba en el pabellón 5B con la señorita Caty, eran dos hermanas la otra se llamaba Sebastiana, si alguien las recuerda. Caty, la recuerdo como muy fría pero guapa. Luego estuve en el 61 y 62 en el pabellón 2B, con la maravillosa Maria Tutor, una mujer especial.
Sólo recuerdo a un chico: Monedero, que recibía muchos paquetes con caramelos y los repartía con los compañeros. No recuerdo mucho pero, poco a poco, si nos vamos reconociendo, podemos ir recordando. Yo encontré este blog en Agosto, no manejo bien Internet pero, poco a poco, me voy haciendo. Es otro mundo, poder dar con gente de hace 50 años. De los castigos, las comidas, y otras cosas, ya sabemos todos que eran horribles.
Un saludo para todos y gracias a ti, Scila, por este blog.


Miguel P.

1/10/09

De Juan

Hola Scila, te mando este correo para decirle a Miguel que en efecto es la señorita María Tutor la que está en la foto conmigo, bella persona por cierto. Soy Juan, un saludo para Miguel y otro para ti, Scila.

30/9/09

Pregunta

Hola Scila y sabinosos. ¿Qué tal el verano?
Mensaje para Juan: Me gustaría saber si en la foto que enviaste estás con la señorita María Tutor.
Un saludo/Miguel

28/9/09

José R., nuevas fotos



Josef R. nos remite dos fotografías de su estancia en el Preventorio, en una está él sólo y en la otra con todo el grupo.
Sería estupendo que alguno de los sabinosos se reconociese en ellas.













9/9/09

Josep R., nuevo sabinoso

Hola, yo también estuve allí, estuve durante 2 veranos, en los años 1.965 y 1.966 (creo que cerraron el preventorio en abril del año 1.967, al menos como preventorio). Yo en esos años tenia 9 y 10 años. Eso si solo estaba 3 meses (desde el cierre del colegio hasta el inicio de las clases, iba de VACACIONES)
De la primera vez que estuve allí, no recuerdo gran cosa, de la segunda aun tengo buenos recuerdos, los días de ir a la playa (con el socorrista que nos vigilaba y no paraba de achuchar a la cuidadora), el típico pelado que nos hacían, solo nos dejaban el flequillo, hi hi hi, he visto alguna foto y me he emocionado y eso que tengo 53 años. Si alguna vez salíamos de paseo a Tarragona, con la familia o de actividades del centro (ir a los Toros, nos llevaron una vez), nos ponían ropa de bonito, pantalón corto azul oscuro y camisa de azul claro.
Y también tengo recuerdos no demasiado agradables, cuando la cuidadora habitual hacia fiesta, la sustituta era una Bruja…con perdón para las Brujas.
El cura con la cabrita que nos vendría a buscar cuando estuviéramos durmiendo, si no nos portáramos bien y no nos confesábamos, nos aconsejaba que por la noche escucháramos los pasos de la cabrita que iba por el Preventorio a buscar a alguno. Y también las Tristes Tardes en la Pinada. Eso sí, aprendí a hacer barcos y figuras con la corteza de los pinos.
Un saludo para todos los que estuvieron allí
Josep R.

8/9/09

José F. Gil, nuevo sabinoso

José F. nos ofrece su visión de una corta estancia en la Sabinosa en los años sesenta, junto con dos fotografías que más bien parecen de los años cincuenta. Nuestra bienvenida más calurosa a este nuevo miembro.
Scila/
Scila
Este Agosto, durante las vacaciones en Tarragona, sentí la curiosidad imperiosa de visitar el Preventorio. Por casualidad encontré esta web y, como no, querría participar contando alguna anécdota, sólo me queda darte gracias por el trabajo que estás realizado Scila.



Me llamo José F., soy de Logroño, y también estuve en esa cárcel. Tenia nueve años y, aunque no recuerdo la fecha, creo que fue el 65 o el 66- de octubre a diciembre- mi pabellón era el 2B. Salimos de Logroño 10 niños en una ambulancia, el conductor y otro individuo, el falangista de turno. Mis padres me habían apuntado pensando que iba de vacaciones y a estudiar, y pasarlo bien, pero nada más llegar me di cuenta en donde me había metido. Mi estancia allí fue una perdida de tiempo, tengo que decir, que intenté pasar lo mas desapercibido posible y lo logré, personalmente no tuve grandes problemas, pero al mi alrededor vi autenticas barbaridades.
Para no alargarme mucho, comentaros alguna anécdota que me afecto muchísimo. Los niños que se orinaban por la noche, estaban condenados a sufrir las broncas que le echaban y les ponían un letrero en la espalda que decía: "POR MEON", les hacían recorrer todo el preventorio así, para la risión del resto de niños. Junto a mi cama había un compañero que se orinaba y, por la noche a la hora de acostarnos, este compañero, estaba temblando, porque sabia que al día siguiente le iban a poner otra vez el dichoso cartelito. 
Tengo que decir que en nuestro grupo había buen compañerismo, quizá por sentirnos tan indefensos y por defendernos ante las posibles amenazas de estos fascistas, y ayudábamos en lo posible a ese compañero. Otra de las cosas que me afectó, y que le tenia un odio insostenible, era cuando nos llamaban a las duchas, éramos como corderitos, nos desnudaban a todos y nos metían en las duchas con agua fría, las carceleras falangistas nos cogían uno por uno, y con un esparto nos restregaban todo el cuerpo, salíamos con la piel enrojecida. Bueno no quiero ser pesado, todos creo que tenemos las mismas experiencias. Mi propósito de este contacto, es facilitar este par de fotografías por si alguno se reconoce.
Een la foto 1 soy el de la izquierda (agachado) y, en la foto 2, soy el cuarto por la izquierda, segunda fila.
Un saludo.

25/8/09

Candal ha vuelto

Hace un tiempo asomó por este lugar Candal (Asturies) pero no nos dejó dirección de correo, hoy vuelve para contarnos su versión, para recordar en voz alta cómo lo pasó en La Sabinosa. Damos la bienvenida más cordial a este nuevo miembro del "Clan de los sabinosos".
Scila/


¡Hola a todos los "sabinosos"!
¿Que tal el veraneo? Espero que bien.
Yo soy un novaté que he intentado escribir en alguna ocasión, de hecho empecé por el mes de Mayo, con muchos problemas, por que éste no es mi sistema de comunicación preferido (puede ser quizá por que no lo domino yo a él y si él a mí).
Soy "Candal.astur", y a fuerza de intentarlo conseguí mandaros unos renglones, esperemos que en esta ocasión tenga mas suerte.
Yo estuve en el "Preve" en el verano de 1.962 ó 1.963 no lo recuerdo, al igual que otras muchas vivencias de aquellos fatídicos tres meses, parece ser que mi mente ha querido dejar aparcado aquel periodo de tiempo, si es cierto que desde que encontré (por casualidad, dicho sea de paso) esta página, se me puso en marcha la maquinaria de la memoria y leyendo algunas anécdotas de otros "sabinosos" han aflorado a mi mente algunos vagos recuerdos, tengamos también en cuenta que por aquella época yo tenia 8 ó 9 años de edad y hoy tengo 55, o sea que ha llovido, lo que recuerdo con mas cariño es a un compañero que no he vuelto ver y del cual me gustaría saber algo, se apellidaba: Maillo y quiero recordar que vivia por la C/ Virgen del Puerto, en Madrid. Yo también vivía en Madrid, concretamente en Canillejas, otros recuerdos que tengo, más o menos agradables, son de los días que recibía paquete y de como, con 9 años, nos las ingeniábamos para intentar meter alguna pequeña nota en el sobre después de leída la carta por la señorita de turno que nos obligaba a cerrarlo delante de ella, pocas veces lo conseguiámos y, cuando te descubrían, el castigo era desproporcionado para una criatura de esa edad, si mi padre Q.E.D. hubiera sabido el calvario que se pasaba en ese infierno, no sé que hubiera pasado. 

También recuerdo al famoso instructor aunque, a decir verdad yo no tuve la desgracia de toparme con él, y digo desgracia por que recuerdo una paliza que le dio a un niño por contestarle y, a pesar de que he visto enormes crueldades, ninguna me ha dejado una marca tan profunda como aquella paliza a un crío que tendría como mucho 11 años. Dejemos cosas tristes, viene a mis recuerdos también un niño, con menos años que nosotros pero mas edad mental, era gordito y le llamaban "boliche", no estaba en mi pabellón, pero le conocí, por que este chico tenia las normas mas relajadas que para los demás, debido a que era el decano del "preve", según decían hacia mas de un año que vivía en el Preventorio.
GRACIAS Scila por esta idea tan maravillosa.


ÁNIMO!!!!!!!!!!!!

4/8/09

Miguel.

Hola Scila y sabinosos, soy Miguel, envío la única foto que tengo del Preventorio. Soy el que está en el centro pero no recuerdo los nombres de los otros compañeros. Yo estaba en el pabellón 2B con la señorita María Tutor. Una maravillosa mujer, si todas hubieran sido como ella habría sido una maravilla.  Ya lo dijo Juan, creo que la foto que envió estaba ella, me gustaría saberlo. Pero hay gente mala que no puedo olvidar, como la gran paliza que me propinó una tal Rosita, porque le salió del... y ya está.
Pobrecita, si vive y tiene coraje, podría contar muchas cosas. Yo os contaré más, pero será por capítulos. Un saludo y Felices vacaciones.
Miguel.

Miguel, la última incorporación

Miguel, la última incorporación al club de los sabinosos, nos llega con los calores estivales y un pie en las vacaciones. Nos remite una fotografía suya con dos compañeros y un corto comentario que promete ampliar próximamente.
Hasta el regreso, pasadlo de la mejor manera posible.
Scila/

27/7/09

Todavía estoy de guardia


Algunos ya se fueron para regresar en Agosto, más bien a finales. Pero a mí me toca hacer guardia todavía un par de semanas, antes de partir hacia los Balkanes donde pasaré un par de semanas o tres. De modo que si hay sabinosos, indecisos por entrar a identificarse, todavía están a tiempo de hacerlo, luego tendrán que esperar turno que después de vacaciones siempre hay aglomeraciones.


A pesar de la ruina y la desidia en la que se encuentran las instalaciones del Preventorio todavía es posible encontrar esquinas y rincones de una belleza conmovedora, sobre todo por los recuerdos que nos provocan.

6/7/09

El estío que viene




Se aproximan esas vacaciones que las altas temperaturas anuncian. Todo el año esperando que lleguen esta fechas, julio-agosto, para olvidarse del ajetreo diario, del trabajo "que dignifica", y del calor bochornoso de las ciudades. Todo el que puede, o se aviene a pagar en cómodos plazos sus gastos extra de verano, se organiza para buscar un hueco en la playa, si no en Cancún, que sea Benidorm, el caso es pisar la playa, mojarse en el mar y volver a casa con la aparente satisfacción de haber disfrutado de unas vacaciones de ensueño. Soñar cuesta poco, pero cuesta, y los sueños sueños son.
También nos gusta soñar y esperamos que este verano, con la calma y la tranquilidad del non fare niente nos invadan docenas de sabinosos que todavía no han dado señales de vida y, sin embargo, sabemos que existen, que pagarían por saber que estamos aquí esperando que llamen a la puerta de este lugar dispuesto para ellos.
Que tengáis un buen verano y mejor regreso a casa.

Scila/

22/6/09

Gota a gota

Foto propiedad de: Manuel Merino Gómez e Isabel Miguel Yuste.
Parece de otro siglo, pero esta imagen del "glorioso" ejercito español, es de los años sesenta, fecha en la que todavía funcionaba el Preventorio.

Con comprensible lentitud se van produciendo las nuevas incorporaciones de antiguos sabinosos. Comprensible por razón de edad de muchos de ellos- las expediciones más antiguas se remontan a finales de los años cuarenta y principio de los cincuenta- y, también, quizás por el estrato social de la mayoría. En muchos casos el acceso a las nuevas tecnologías- Informática e Internet- no habrá formado parte del acerbo de muchos de aquellos críos que, seguramente, no han tenido acceso a una formación académica ortodoxa.

En cualquier caso el número se incrementa poco a poco y, esperamos que así continúe hasta configurar un grupo numeroso. Desde aquí animamos a quienes todabía no se hayan identificado a que lo hagan, ya es hora de salir del armario y contar a los demás por lo que pasamos en aquel lugar.

4/6/09

Visitantes


Fotografías del río Cubia.
Lugar: Asturias.
Autor: Luís M.




Nos visita "Candal.Astur", lástima que no nos haya dejado unas palabras, que nos hablase de su interés por "los sabinosos". ¿Tal vez también él, o algún pariente próximo, lo sean? En cualquier caso agradecemos su interés y el tiempo que nos dedica. En su honor colgamos esta fotografías del río Cubia, cuyo autor es el asturiano Luis M.

29/5/09

José Mª

Durante los últimos días, distintos medios de comunicación (televisión, prensa escrita, radio…), se han hecho eco del escándalo irlandés, debido a los abusos sexuales cometidos por miembros de la iglesia católica sobre niños acogidos en instituciones como orfanatos e internados estatales, gestionados y dirigidos por esa iglesia.
No menos escandalosa resulta la reacción de la propia iglesia y del Estado, que tratan de cerrar el asunto con una serie de indemnizaciones de tipo económico. Lo repugnante de esa violencia sexual ejercida sobre aquellos niños, oculta, o al menos minimiza, otra violencia física y psíquica que también se ejercía sobre esos mismos niños, según manifestaciones de algún afectado (sería interesante acceder a la información completa).
Posiblemente, muchas personas habrán exclamado: ¡Qué cosas ocurren por ahí! Pero también habrá otras a quienes les hayan hecho recordar experiencias propias ocurridas en este país, o quizás sería mejor decir en otro país que también existió, pese a los intentos de ocultación por la secular desmemoria de una importante parte de esta España (o como se le quiera llamar), ese país del franquismo, del nacionalcatolicismo; ese país tan feo pero tan real.
De mi experiencia personal en los Hogares del Auxilio Social, no puedo hablar de agresiones sexuales (siempre y cuando, la negación y la represión de cualquier manifestación de la sexualidad —el terrible pecado de la carne— no constituya, en sí misma, una agresión), pero sí de un amplio abanico de agresiones y vejaciones: palizas, exposiciones al frío, al calor, a la sed, sometimiento al ayuno…
Toda esta violencia sobre seres débiles, indefensos, sobre niños, era ejercida por: “los instructores” (falangistas); por “las guardadoras” (Sección Femenina), y por los curas (en mi caso monjas, obviamente católicas). Una delicia. Un encanto.
Durante un tiempo, el Auxilio Social fue utilizado para el tráfico de niños (ver el trabajo de R. Vinyes, M. Amergou y R. Belis en "Los niños perdidos del franquismo"), más tarde como lugares de adoctrinamiento. Hoy no existen, lógicamente. El Auxilio Social se eliminó allá por el año 1976. ¿Quedan secuelas? No lo sé. Lo cierto es que el ministro Martín Villa ordenó la quema de los archivos que tenía la Falange en Barcelona, donde estaba depositada toda la documentación de la Sección femenina y Auxilio Social. (Los niños perdidos, pág. 197).
Pero queda la memoria y queda el fantástico trabajo de Carlos Giménez Paracuellos. Tenemos que recordar, como decía el propio Giménez, que: "No deben conceptuarse estos colegios como instituciones perversas, corrompidas o marginales dentro de un Estado racional, humanizado y democrático, sino como instituciones completamente integradas en la normalidad de una España que era así, la España franquista". Para terminar y para que no haya dudas, diré sólo dos cosas: 
1) efectivamente soy anticlerical radical.
2) no tengo cuentas pendientes. Lo único que ocurre es que no puedo explicar con palabras la pena y el dolor que sentía cuando me castigaban un domingo sin la visita de mi madre. Todavía hoy me estremezco.

José Mª R.

27/5/09

Anónimos

Hoy nos han dejado un mensaje interesándose por ciertos aspectos de lo ocurrido en el Preventorio e, incluso, por la historia del guardián (no el del centeno) de las ruinas. Contestaremos sus peguntas tan pronto nos deje un e-mail de contacto, no pedimos más, ni siquiera debe registrase, pero al menos un correo donde dirigirnos, sí.

26/5/09

La memoria fotográfica



foto cedida por JA de León.



A esos pijamas ásperos, de crudo lienzo rallado, parece faltarles la clásica bola de hierro engrilletada al tobillo de los  pequeños penados.
Scila/

La memoria fotográfica




foto cedida por LA de León.

Parecíamos los niños de Biafra o Etiopía.
Scila/

La memoria fotográfica





Foto cedida por JA de León.


Estas parecen las imágenes del famoso pesaje semanal, había que engordar, o la cuidadora perdía su supuesta gratificación. Prohibido vomitar, o te lo comes.¡Chaval, no estás autorizado a perder peso!
Scila/
foto cedida por Juan A.


Las ordenadas huestes de niños salen a "jugar" a la playa, cruzando el muro del Preventorio. ¡Qué inofensivo parece ahora!, medio derruido. Pero que terrorífico nos parecía entonces.

Scila/



La memoria fotográfica



Esta era una hora, las cinco de la tarde, en la que unos lloraban con la carta de sus padres y otros lloraban por no recibirla...


foto cedida por Juan A. de León.

6/5/09

En qué terminará?



Parece que hace años se abrió un debate más bien local sobre el destino de la península sobre la que está construido el Preventorio de La Sabinosa. Unos querían un complejo hotelero (miles de millones de inversión y de beneficios) otros optaban por la transformación en un centro cultural, formativo, de interés público.

El debate debe seguir soterrado y sin decidir mientras todas las edificaciones amenazan ruina inmediata. La Diputación quizás ha hecho un ejercicio inaudito de irresponsabilidad dejando que se llegue a tal punto de ruina que habrá que meter las excavadoras antes de que caigan las ruinas sobre algún curioso, o descubridor de fantasmas, de los muchos que se adentran- con riesgo cierto- en las lúgubres estancias del campo de concentración infantil.

30/4/09

Insistimos

Hoy nos llegó un texto anónimo de alguien que dice haber visitado recientemente La Sabinosa y haberse asustado de lo que vio, o intuyó. Nos pide información y aclaraciones sobre el lugar y su historia, información que le podemos ofrecer sin ningún problema, siempre y cuando tenga la amabilidad de identificarse, al menos con un correo, ¡qué menos!

5/4/09

Anónimos

Hoy nos llegó un texto anónimo de alguien que dice haber visitado recientemente La Sabinosa y haberse asustado de lo que vio, o intuyó. Nos pide información y aclaraciones sobre el lugar y su historia, información que le podemos ofrecer sin ningún problema, siempre y cuando tenga la amabilidad de identificarse, al menos con un correo, ¡qué menos!

3/4/09

Respuesta al comentario de Jesús

Tienes razón, es muy complicado encontrar a alguien tras tantos años, pero sigue llamándome la atención que, de entre los reaparecidos, nadie sea del grupo de nadie.
En cuanto a cómo nos fue la feria a cada uno, es también muy habitual que eso ocurra. Había, sin duda, cuidadoras "normales", si tuviste la fortuna de caer con una de ellas, pues sin malos tratos las cosas cambian mucho. Ten en cuenta que el mero hecho de estar a cientos de kilómetros de las familias para muchos ya era algo doloroso, si se le suman los castigos físicos, la mala comida, el pánico al instructor- imagínate a los que les tocó comerse su vómitos, qué recuerdos pueden tener- si eras uno de los meones... todo eso se iba sumando y terminaba por ser una situación terrible.
Pero evidentemente cada quien cuenta la feria como le fue y no me parece nada extraordianario que, como tú, haya otros críos que volvieron satisfechos de su estancia allí, les fue mejor que a la mayoría por las circunstancias que fueren. Y es comprensible que te sorprenda leer lo que aquí se dice, tanto como a nosotros saber ahora que había compañeros que no lo pasaban mal del todo.
Bueno Jesús, que espero verte por aquí más a menudo. Un abrazo.

Scila/

1/4/09

A cuenta gotas

Con lentitud pero, gota a gota, los ex sabinosos van acudiendo al Blog. Curiosamente a pesar de la veintena de compañeros identificados nadie recuerda a nadie. La explicación es fácil, fuimos miles los que pasamos por aquel lugar siniestro y es comprensible que sea casi una lotería coincidir con gente del mismo año y en el mismo pabellón. La incomunicación- inexplicable- a la que nos sometían impedieron que nos conociésemos unos grupos con otros.

De todas formas, el Blog está ahí, una puerta abierta al reencuentro con la Sabinosa, con el Preventorio o, campo de concentración infantil, como algunos lo llamábamos. Invito a cualquiera que lea este blog y haya estado en la Sabinosa, o conozca a alguien que estuvo, que nos deje su comentario y un correo de contacto.

Salu2/Scila

14/2/09

Patricio y José, los gemelos





Hola de nuevo Scilas, he encontrado dos fotografías de nuestro paso por la Sabinosa que te adjunto para su incorporación a la página. Nuestra experiencia, la de mi hermano Patricio y mía (somos gemelos) no las recordamos con claridad, nos habíamos olvidado de tantas vejaciones, no hemos hablado mucho de aquello pero al entrar en tu pagina nos pusimos a recordar: nuestros recuerdos empiezan en la Plaza de España, con la vacunación y después ese terrible viaje en los trenes de madera, un larguísimo viaje tirados por los suelos, llegamos negros por el humo de la máquina. 
Recuerdo la primera vez sentimos terror al vernos en aquel lugar, sin saber porqué las Señoritas nos trataban sin consideración a unos niños que teníamos siete años. Recuerdo que nos pasamos la noche llorando y llamando a nuestra madre. El primer año vino nuestra madre a vernos y las Señoritas parecían muy amables con nosotros, pasamos la tarde en la playa con mi madre, sin dormir la siesta y cuando se fue nos dijo que como el tren pasaba por la playa estuviéramos atentos que nos diría adiós, pues bien, cuando volvimos al pabellón y mi madre se fue nos dijo la seño que estábamos castigados y que pasaríamos el resto de la tarde sentados con todos los chicos en la playa pero nosotros estaríamos de espaldas a la vía y con la cabeza entre las piernas con lo cual oímos pasar el tren pero no pudimos decir adiós a mi madre esto nos pareció muy cruel.
He leído testimonios de los que pasaron por allí pero hay cosas que no logramos recordar, éramos muy pequeños. No recuerdo que rezáramos el rosario, sí recuerdo que estábamos todo el día sentados, en el solarium, jugando a las tabas, tirando chinas para arriba y cogiéndolas con la mano, nos hicimos expertos.
Recordamos el comedor como un suplicio, la comida era asquerosa y, efectivamente, si vomitabas tenías que volver a comértelo. A mi hermano le obligaron a comerse su propio vómito y, como no había forma de hacérselo comer, la señorita le dio un puñetazo en plena cara, ocasionándole una hemorragia nasal y le llevaron a la enfermería. Yo me quedé esperando en un estado de ansiedad terrible.
También tenemos buenos recuerdos, como los pocos baños en el mar, los paseos por la playa larga y la montaña. Y un par de salidas a Tarragona en Domingo a ver una novillada y un partido de fútbol. No recuerdo el nombre de ningún compañero, sólo el apodo de uno de ellos: “MECON”. De las señoritas no acordamos nombre, excepto una que se portó con nosotros de maravilla, la señorita Clara.
Hacer las necesidades era un suplicio, todo el día con ganas pero no nos daban tiempo para ir al servicio y durante el día no estaba permitido. Nos levantábamos por la noche- a escondidas- para poder evacuar. A pesar de todo nos quedamos con los buenos recuerdos. De aquella época nos han quedado tres olores: el del comedor, la playa, y el monte.
Somos de Madrid, de Cuatro Caminos. Un saludo afectuoso a ti y todos los Sabinosos.

29/1/09

Juan Martinez

Hoy nos llega el testimonio de un nuevo sabinoso- Juan Martínez- que, como la mayoría, aporta dos visiones diferentes de su estancia en el Preventorio, una buena y otra pésima.
Bienvenido al club.

Scila/

Hola Scila, yo también estuve alli. Me llamo Juan Martínez y aunque vivo en Getafe soy de Madrid. Al final de los años 50 estuve dos veces en el Preventorio de la Sabinosa, tengo muy malos recuerdos y no querría ni acordarme si no fuera porque la última vez di con una cuidadora genial, se llamaba María Tutor y era la bondad en persona, una mujer que no olvidaré nunca por muchos años que viva. Mis peores recuerdos, sin duda , provienen de la señorita Emilia, más mala que un dolor de muelas. Respecto a la comida es verdad, habia bichos en el comedor y a veces los encontrabas en el plato. Te mando esta foto del Preventorio- soy el de la derecha-. Gracias por publicarlo en tu blog.
Ciao, un saludo a todos los que tuvieron que pasar por ese lugar.

J.M.

14/1/09

Jesús de Tetuán



Hoy se incorpora un nuevo "sabinoso" al club. Se trata de Jesús, de Tetuán. Siempre es interesante recibir una nueva incorporación pero en este caso lo es más por ser- creo que el único hasta ahora- que dice guardar recuerdos agradables de aquel lugar. Es bueno el contraste de opiniones diferentes. El texto remitido es extenso por lo que nos vemos obligados a transcribir solamente algunos párrafos por cuestión de espacio y equidad con el resto de colaboradores. Bien venido al club, Jesús.

Scila/



Me es muy grato reencontrarme con los compañeros que convivimos en los años 50 y 60 en La Sabinosa. Vaya por delante que he leido todos los comentarios que habéis puesto en este Blog y tenéis un mal recuerdo de aquella época. Sin embargo, mis recuerdos son totalmente distintos, yo recuerdo aquella época como bella y bonita. Quizá sea porque en las dos etapas que estuve fui con varios amigos de la calle donde yo vivía, calle Porfirio, y no me encontraba sólo. Las dos veces estuve con la Señorita Domi, siempre se portó muy bien conmigo. Estuve dos veces, en las primaveras de 1959 y 1963, con 8 y 12 años. Tres meses cada vez. De la primera tengo menos recuerdos, entonces era muy niño. De la segunda vez recuerdo más vivencias.
Había que pasar un reconocimiento médico en una sede del Patronato Antituberculoso de Andrés Mellado, Madrid. Los niños que íbamos no podíamos estar enfermos. Éramos de familias humildes, hijos de los perdedores de la guerra.
Nuestra llegada era recibida por los niños que ya estaban allí con cánticos cómo: "Nóvatos del Pré" "Nóvatos del Pré". Llevándose las manos al pecho y dspués estirando los brazos a la misma altura. Había otros cánticos cómo: "Los más vetes del Pré" o "Vete puro Nova". A los nuevos se les reconocía por la ropa , era distinta a la de los veteranos. Las zapatillas eran de suela de esparto, tela y atada con cintas por encima del tobillo.
Hay compañeros que dicen que pasaban hambre, o que la comida era mala, o que a alguno les hicieron comer sus vómitos. Yo no recuerdo esto. Sí recuerdo que al acercarnos al comedor siempre había el mismo olor a comida, patatas cocidas con mejillones o algo así. Recuerdo que íbamos a beber agua de la fuente que aparece en alguna foto, y nos llevábamos un dentrífico untábamos un poco en los dientes y al beber el agua parecía más fina.
Los baños estaban al final del pabellón. Todos los niños se bañaban desnudos, excepto yo, con 12 años había desarrollado el vello púbico y la Sta. Domi me dio un bañador azul para que me tapara. Los demás niños eran más pequeños y no tenían "Pelillos". Las playas eran muy bonitas y desiertas de gente, sólo estábamos los del Preventorio. La Corta o de los Curas, La Larga o la Sabinosa. Nos bañábamos poco, pero podíamos jugar. Hacíamos excusiones a Tarragona, o al monte. Cuando ibamos al monte, nos daban de merienda un suizo con un huevo duro en el medio. En la playa recogíamos conchas, lapas, o "uñas" con las que hacíamos las pulseras o collares. Al volver a casa los repartíamos entre las hermanas o vecinas como recuerdo de nuestra estancia en la playa. Todas las tardes había que rezar el rosario. Yo cantaba el rosario, en latín. Quizá por eso me trataban bien, no recuerdo que a los demás niños no les trataran igual que a mí. Algunos habláis de niños hambrientos o tristes. Mis recuerdos son de niños alegres, siempre cantando, en las fotos no se nos ve mal nutridos. No me gustaba el Instructor, era como un sargento. Era temido entre los niños por su autoritarismo. Otro buen recuerdo es de un amigo que hice allí, del cual no recuerdo su nombre. Vivía la Colonia de los Tranviarios. Al poco de volver le hice una visita y desde entonces no volví a verle.Bueno, quería haceros llegar mis recuerdos a los que pasamos por La Sabinosa, como suele pasar, cada uno cuenta la feria según le va, que por lo aquí contado, nada tiene que ver unos recuerdos con los de otros. Los míos son buenos, y así lo digo.
Agradecer a Scila que haya creado este foro de debate y recuerdos para los que pasamos allí una parte de nuestra vida. Gracias, de corazón. 

Jesús, de la calle Porfirio.

7/1/09

Jesús Ibañez

Hola Scila. Respecto a las fotos, no tengo ninguna, con 12 años me fuí a Brasil con mi familia y aquí dejé todas mis pertenencias, a la vuelta partí de cero, en cuanto a objetos del pasado. Tengo vagos recuerdos de que estuve en el pabellón 2, pero de las señoritas, lo único que me recuerdo es que eran crueles a más no poder (creo que había dos, pues en el piso de arriba había otro pabellón), a la menor que hacíamos, nos ponían en fila, de manera que pasáramos por delante de ellas con los dedos de las manos en cucurucho y nos daban con un palo en las puntas de los dedos y si fallaban o desplazabas la mano, te daban dos o tres veces. Si recuerdo que en las salidas que hacíamos a diario, mi grupo era de los que tenía peor suerte, casi siempre estábamos sentados, con la cabeza entre las rodillas. 

A pesar de que era verano no nos dejaron bañarnos ni un día. Respecto al comedor lo recuerdo como un sitio infernal, pues las colúmnas que había en el centro de las mesas estaban llenas de moscas y, si te caía una en el plato, te lo tenías que comer, a parte de que la comida era ya vomitiva. En alguna ocasión a algún niño le hicieron comer incluso cuando había vomitado en el plato. Recuerdo que había un niño, que su familia le enviaba tebeos y nos los dejaba a cambio del culín de agua que nos daban en las comidas.
Por lo demás, corroboro los comentarios que han puesto algunos compañeros, lo del "vete puro nova" y "X días pa la vía" que cantábamos cuando nos cruzábamos con otro pabellón, lo de la peluquería, la enfermería y todas las perrerías que nos hacían. Es triste que en la memoria de una persona queden estos recuerdos de la niñez (que deberían ser los más felices de tu vida).

Jesús/