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25/8/14

Las colonias

Así era nuestro comedor, pero sin monjas.
Así era nuestro comedor, pero sin monjas.

Siguen pasando los años y aumenta el lamentable estado de ruina en las instalaciones de La sabinosa. Se deterioran todavía más y más deprisa sin que nadie, ni personas ni instituciones, le pongan remedio.
Lástima, los edificios ya son de imposible recuperación, cuando sean derribados y los camiones se lleven los escombros también se llevarán la memoria, las imágenes y los sentimientos que entre sus muros encerraron durante décadas, procedente de las vidas de miles de chavales que vivieron- cada uno a su manera- una época de su infancia, internados en las famosas "colonias" infantiles para muchos, campos de internamiento infantiles para otros.
En cualquier caso esos edificios no deberían haber terminado así, en ruina absoluta, cuando podrían y deberían ser de utilidad pública y al tiempo un lugar de recuerdo vivo de una época tan especial para miles de niños que pasaron por sus instalaciones en la dura  e interminable posguerra.


                                                          

                                                              Así es ahora.

31/7/14

P. Santoyo

Hola. acabo de incorporarme al grupo. Estuvimos mi hermano y yo en La Sabionosa, creo que en año 56 o el 57, durante el verano. Si mal no recuerdo dormíamos en el pabellón más cercano a la vía del tren, recuerdo que en la planta baja, en la segunda cama según se entraba a la derecha, pues siempre avisábamos durante las siestas si venía la señorita. De ella tengo una vaga imagen pero no de su nombre, a mi me cogió algo de manía y siempre me contestaba de mala manera. Para nosotros era la primera vez que veíamos el mar y es una imagen que me quedó grabada para siempre la llegada a Tarragona al amanecer y el resplandor de las primeras luces en las aguas. Sólo tengo algunos buenos recuerdos, de los malos- como las comidas- prácticamente tengo una recuerdo borroso, disfruté mucho en la playa y me gustaba ponerme en el marcador durante los partidos de fútbol, lo que lamento es no tener ninguna fotografía. Espero reconocerme en alguna de las vuestras. Un saludo a todos.

28/1/14

Un recuerdo de Ramón.


Amigo Scila, lo primero desearte a tí y a todos los "sabinosos" - seguramente la mayoría jubilados -,  un saludable  y feliz 2014.

Precisamente, y recordando las Fiestas de Navidad, me han venido a la memoria los recuerdos de aquella Navidad de 1.959 que tuve el infortunio de pasar en "nuestro" Preventorio.

Mis padres, en el Pirineo de Lleida, no tenían la posibilidad de venir a verme. Pero en Roquetas (localidad próxima a Tortosa, cerca del Delta del Ebro), vivían  y viven todavía, familiares míos. La distancia es de unos 80 km. Mi tío recibió una carta de mis padres autorizándole a poder ir a buscarme y pasar el día de Navidad con ellos. La semana antes, se presentó en la Sabinosa y el Director le concedió permiso para ello.

Día de Navidad: mi tío con su Peugeot 250- una moto de los años 50 -, después del viaje por la N-340 de la época- podéis imaginar la aventura que esto representaba- llega al Preventorio.

Yo le veo por una de las ventanas y corro hacia él. Una cuidadora me cierra el paso, me coge de la mano y me dice que me espere. Mi tío habla con otra de las cuidadoras; yo no sé de que hablan, pero veo como mi tío sube a su moto y se marcha. No recibí ninguna explicación por parte de las cuidadoras.

Años después, cuando con mis padres se trasladaron a vivir a Roquetas, supe el por qué: el día que mi tío vino a entregar la carta  de mis padres, me trajo de regalo un cochecito de fricción (os acordáis de cómo eran, ¿no?). Pues bien, le dijeron que con el cochecito había hecho mucho ruído. ¡Qué falacia! Aquel coche, para mí una auténtica maravilla, duró en mis manos, como mucho diez minutos. Luego desapareció y nunca más se supo.

En fin, otra triste situación de una larga colección que nos tocó vivir en aquel antro. Por suerte vinieron otras muchas Navidades y más felices.


Un abrazo a todos.

Ramón G. S.

26/12/13

Feliz Navidad

Con mis mejores deseos a todos los sabinosos y allegados para estas fiestas. Seamos o no creyentes en mayor o menor medida todos nos sentimos imbuidos del ambiente festero y culinario de la cristiandad, lo que no quiere decir que aplaudamos las ocurrencias del preconciliar Rouco y sus acólitos. 
Os deseo una feliz salida y entrada de Año y- por supuesto- que el próximo 2.014 sea infinitamente mejor que el que se va, aunque suban el recibo de la luz, y el del gas y el del agua, y el de...  aunque nos suban todos los recibos no nos matarán la ilusión. Con suerte hasta los sueldos subirán un 0,005%, o no, dependerá de los recortes que vienen.
Confío en que nos seguiremos viendo por este lugar compartido por los sabinosos que poco a poco nos vamos reencontrando y si alguno se van que avise, queremos despedirnos.

Un abrazo compañeros. 
Scila/

12/12/13

Arturo, uno más




Hola, me llamo Arturo, estuve en la Sabinosa con la expedición 200, fué en verano del año 1.957, y estoy de acuerdo con algunos de los comentarios que se han escrito a lo largo de este tiempo.

Aunque he podido comprobar que fué a partir del año 1.960 en adelante cuando peor lo pasaron. Estoy de acuerdo con las comidas, que eran bazofia y nada más, que nos daban un sólo vaso de agua en la comida, y eso que era verano, pero a pesar de todo ésto yo no lo pasé tan mal como otros "sabinosos".


 Recuerdo que me castigaron a copiar mil veces la frase: "Prometo ser bueno y no mentir nunca", que me impuso el instructor (Juan Antonio o José Antonio creo que se llamaba) a instancias de la señorita de guardia de por la noche (no recuerdo su nombre), sólo por bajarme de la cama y estar en el suelo debido al calor que pasábamos.

La señorita que estaba al cuidado nuestro se llamaba Mª Teresa y se portó con todos nosotros de maravilla (al menos yo no ví ningun mal trato con ninguno de los chicos).  También recuerdo que un día nos llevaron a ver un partido de fútbol al campo de la Gimnástica en Tarragona capital.  En el Preventorio había un pequeño campo de fútbol  con hierba y, para aquella época, estaba muy chulo. Allí jugabamos los "sabinosos" una expedición contra otra expedición.



Recuerdo a dos compañeros que son con los que más amistad hice, se llaman Enrique y Juan Antonio, el primero vivía por Legazpi y el otro en Vallecas.

Mando tres fotos de mi estancia, yo soy el que está sentado al lado de la señorita Teresa y en la otra soy el del centro.  Espero que si alguno me reconoce se ponga en contacto conmigo mediante este blog.

 

SALUDOS

13/11/13

Nuevo documento gráfico


                                                                                                                                                                                                  Nos ha llegado este documento gráfico en el que aparece una de las más jóvenes cuidadoras de La Sabinosa, ¿alguien la recuerda? 

3/10/13

José L. Castro



Hola Scila, me alegra mucho poder tener noticias de alguien que aparece en la fotografia que adjunté, por desgracia a mí me pasa lo mismo que a él, no recuerdo a los que fueron mis compañeros durante los meses que pasamos juntos.
José Luis, lamento que tus recuerdos no coincidan con los míos, por suerte para mí, no recuerdo malos momentos, quizás es que éramos muy jovenes y algunos los hemos olvidado. En cuanto a mi historia de la hija de una de las cuidadoras, no sé si fue la vez que nos hicieron la fotografía, pero sí recuerdo que estaba en el pabellón pegado a la vía del tren, en el que estaba la conserjería, creo que es el 7, en la primera planta. El de la señorita era el de enfrente y estaba en la habitación que está por encima del 2º piso, es decir el tejado.
De todos modos cada uno cuenta la historia como la recuerda, me gustaría que tú te acuerdas de algo nos lo contaras, dado que mis recuerdos son mínimos a pesar de haber estado tres veces.

Si a alguien le interesa visitar la Sabinosa, he de decirles que estuve a primeros de Julio de este año (tengo fotografías por si alguien las quiere), solicité permiso por teléfono a la Diputación a traves de una señorita a la que me remitieron, no la conocía pero se portó maravillosamente, en un tiempo récord, en tres dias me consiguió el permiso, y todo por e-mail y teléfono. El guarda se puso en contacto conmigo para quedar, dicen que es mala persona, se equivocan totalmente, es agradable y dispuesto a enseñar todo lo que puede, pues se han colocado unas segundas vallas alrededor de todos los edificios. Si alguien necesita el nombre o teléfono se lo puedo facilitar. Scila, te adjunto algunas fotografías para que puedas ver la nueva situación de la Sabinosa si quieres alguna mas te las puedo enviar, hay bastantes.
Saludos para ti y bienvenido José Luis. 
Un fuerte abrazo.

24/9/13

Para los sabinosos

Hola Jose Luis, hace un par de días hablando con mí hermano y recordando que de niños habíamos estado en La Sabinosa, nos pusimos a buscar en Internet y cual fue nuestra sorpresa al descubrir que también somos SABINOSOS. Concretamente yo salgo en una foto debajo del nombre JAIME, me tiene la bruja-cuidadora cogido a su izquierda. Tenemos muchos recuerdos de aquella estancia, la mayoría malos para unos críos que éramos. Estuvimos tres meses en el verano de 1966. No se trata de buscar culpables de aquello, simplemente recordar anécdotas que nos tocaron vivir. He leído comentarios de gente que se siente indignada por sacar ahora estos temas a relucir. Es historia verídica de este país vivida por nosotros. Y de momento nada más. Cuando tengas un ratillo Scila, me contestas. Tengo mucho que contar.
Un saludo cordial.
Juan/

4/9/13

Para José Luis

Estimado amigo: Si deseas colgar tus experiencias en este blog es muy sencillo, las escribes y las envías al correo que se indica (scilas@gmail.com) al igual que las fotografías que pretendas adjuntar, siempre en formato "jpeg" y enviadas como adjuntos, no pegadas en el texto. También es imprescindible que envíes un correo visible, en esta ocasión no nos ha llegado ninguno, al que poder dirigirte un comentario.
Saludos y bienvenido al Blog de los sabinosos.
Scila/

Un nuevo José Luis

Esta foto yo también la tengo, soy el segundo desde el fondo y también me llamo Jose Luis, y desde luego no recuerdo nada positivo de aquel infierno, ni siquiera a ese segundo Jose Luis y su historia de la hija enferma, lo que no quiere decir que no sea cierto, sólo que mis recuerdos son todos horribles. No sé cómo poner mi foto, que es la misma, como prueba de que yo soy José Luis, el segundo desde el fondo, o el tercero desde el primer plano.