Enero 25-2012
Entre los años 1952 y 1954, estuve dos
veces en este Preventorio, sólo me quedan unos pocos recuerdos. Cuando nos llevaban a la
playa y nos obligaban a permencer sentados en corro, y jugabamos con las tabas. Desde la llegada solíamos cantar los días que nos faltaban para volver a casa,
con aquel soniquete: (5 días pa la vía ).
Cuando pasabamos delante del viejo Zicuta, el
peluquero, que nos pelaba casi al cero, entonces cantabamos: "¿Quién te ha
cortado el pelo? ¡Zicuta el peluquero!
También me acuerdo de la cara de «Facha«
del Instructor que, algunas veces, con aires de Joaquin Blummen, nos hacía
ejecutar una tabla de gimnasia, tan pobre era que consistia tan sólo en tres movimientos. Y, qué decir del cura que a mis ocho años me preguntaba si me la meneaba y, como no
comprendía su pregunta me la repetia hasta que le contestaba en negativo, quizas sea la única
vez que mentí a un confesor.
Aquello fue como los viajes, de ser perfectos, no tendríamos nada que contar a nuestros nietos.
Alfonso, desde Suiza.